En Santiago un vehículo motorizado transita en promedio a una velocidad de 40 km por hora, esta velocidad es producida y definida por la congestión vehicular existente en las grandes ciudades, lo que conlleva elevar la producción de CO2 y favoreciendo perjudicialmente el efecto invernadero, dañando la salud y generando aumento de costos a los Estados. La dañina carbonilla acumulada en los diversos elementos y partes que componen un motor es una de los factores principal en la emisión de gases contaminantes NOX y MP2,5. La forma mas optima para revertir esta situación es la descarbonizacion de motores por medio del gas oxihidrogeno, técnica con certificación internacional la cual posee resultados efectivos, medibles y cuantificables en un motor Diesel el cual produce mayor cantidad carbonilla. Esta tecnología permite a la compañía obtener una disminución real y efectiva de CO2 en flotas de sus vehículos, además de los ahorros en costos de mantención, repuestos y tiempo.