La idea es incorporar en los colegios, un horario extra de clases en donde puedan desarrollar en formas de "clubes" junto con sus pares, sin importar el año que cursen, actividades deportivas, culturales, musicales.
Que cada uno pueda elegirla, y este asesorada por un profesor o responsable. Que ellos mismos puedan desarrollar su programas, preparar festivales, organizar eventos afines.
Que la variedad la elijan sus propios alumnos, ya sea Fútbol, Basquet, Ajedrez, Rock, Cocina, Literatura, Teatro, Karate...mientras cumplan con un cupo mínimo de inscritos sería suficiente.
La variedad debería solo limitarse a la capacidad edilicia u horaria de la institución.
Con esto, no solo los jóvenes podrán desarrollar actividades de su interés, sino fortalecerá sus principios de pertenencia con la institución; sus lazos de amistad y compañerismo; y sobre todo disfrutar por ir al colegio.